jueves, 30 de octubre de 2014

LEYENDO ESTO ME ACORDE DE TI...

Leyendo "una noche con ella" de Anabella Franco, me encontré esto, y me pareció digno de ser publicado:

"Si el pasado me busca, dile que he salido.
Si el futuro se apresura, dile que vaya mas despacio.
Si el presente es umbroso, recuerdame la muerte y veras como el pasado se aleja y el futuro ya no me atemoriza.
Yo voy en su busqueda.
Si en las sombras del destino me ves espiando en tu ventana es que te he perdido.
Soy  feliz incluso en la oscuridad si tu presencia es la que habla, y te amo aunque el silencio borre las huellas de tu voz.
Todos buscan la felicidad pero pocos se atreven a encontrarla."

Me encanto el libro, me impacto la historia, pero cuando me encontré con esto no pude evitar sentir que quien lo decía era yo, y a quien se lo decía era a ti... mi ángel.

Ratch Kendel

martes, 28 de octubre de 2014

ESCRIBIR

Para mi, escribir es catártico, tomo un lápiz y un papel y encuentro el camino a la libertad de mi alma.
Plasmo en cada palabra pedazos de mi. Con cada palabra sucumbo a mi delirante mente y la dejo fluir sin mas.
Escribo porque me gusta sentir como al aferrarse la tinta en la hoja, quedan impregnados mis sentimientos en las palabras.
Una hoja en blanco es como un lienzo virgen que le exige al artista hacer con el, y no lo juzga, e independiente de lo que el pintor haga, ese lienzo siempre sera feliz porque no muere en blanco... en el olvido.
Escribir y leer, dos verbos que encierran y a la vez liberan el espíritu, que nos permiten vivir nuevas vidas, explorar nuevos mundos y crear otros universos.
Cuando escribo escapo de la realidad, del mundo y a veces también de mi misma; pero al final del párrafo me encuentro con la sensación de haber derramado mi corazón en un escrito.


Ratch Kendel


jueves, 16 de octubre de 2014

PARA MI ÁNGEL…

Esto es para ti: mi ángel. Esta mañana volví a ver ¿conoces a Joe Black?, ¿la has visto? Me encanta esa película ¿y sabes porque?, porque me recuerda lo nuestro, me acuerdo de ti, una historia de amor casi imposible.
Me hace pensar en lo infinito que es el mundo y la existencia, y en lo poco que a nosotros –los seres humanos- se nos permite ver. Me pregunto ¿Cuántas de esas historias que a veces leo en los libros y parecen fantasías e imaginación del autor pueden ser ciertas?
A pesar de los pesares, nuestra historia fue real. Quiero que sepas que muchas de las cosas que siento y también mucho de lo que escribo en este blog es por y para ti, porque aun conservo la esperanza de que en algún momento las leas, porque son mi declaración de amor. 
Te amo con intensidad e ilusión y  te deseo con cada poro de mi ser. 
Por favor encuentrame, espérame, búscame, ámame... no dejes de hacerlo. Encontrarnos de nuevo en esta vida sería grandioso, pero si no es posible que eso suceda ahora, encontrémonos en el tiempo.
Mi ángel de la soledad, te ame desde el momento en que te conocí en esa vieja cafetería, tu voz me cautivó y desde ahí me ataste a tu alma. Cierro los ojos y aun te escucho, puedo verte. Siento tu amor y eso me hace inmensamente feliz, porque es una forma de tenerte conmigo aunque no estés aquí.
Espero volver a besar tus labios una vez mas, y decirte que nunca te he dejado de amar, que lamento no haber sido mas fuerte para esperarte, que no importa lo que sucedió, que ahora te perdonaría de nuevo una y mil veces si fuese necesario. Te diría que no devolvería el tiempo, ni cambiaría nada, porque la distancia me hizo ver lo que es el amor verdadero, que en este tiempo lejos de ti, he valorado todas y cada una de tus palabras, te he entendido a plenitud cuando decías que la verdadera felicidad era aprender a vivir con lo que se tiene y lo que no. Solo te refutare una cosa, y es que aunque un día dijiste que todo son sombras y arena, tu nunca lo fuiste para mi, porque aunque la luz o el sol se vayan de mi vida, tu sigues ahí como una sombra mágica, y aunque la arena se escapa entre los dedos como el agua, tu nunca te has ido de mi. 

Amándote eternamente
Ratch Kendel




jueves, 2 de octubre de 2014

RECUERDO DE UN BESO EN UN CAFÉ



Esta tarde paré en un pequeño lugar a tomarme un café, me senté en un silla de madera rustica y observe el paisaje  tan  alejado de la ciudad y con una vista impresionante de la sábana y la naturaleza., por un momento respire aire puro y observe el verde de los arboles. 
En medio de mi contemplación llego el camarero con mi pedido, después de agradecerle me quede a solas con mi vaso y la maravillosa vista, pero cuando probé mi bebida, que estaba deliciosa y tibia, sentí como si algo me arrancara del lugar en donde estaba y me llevara a a tu lado. Sin darme cuenta cerré los ojos y regrese a aquel momento en que me besabas después de bebernos un café, sentí nuevamente tus labios, su calor y su movimiento. Desee que fuera real, desee besarte de nuevo y saborear tu boca milímetro a milímetro. 
Y mientras estuve allí sentada no pude dejar de pensar en tus besos, fue como si con cada sorbo reviviera el sabor de tus besos,  la textura de tus labios y el calor de tu cuerpo. 

RATCH KENDEL